BOFINGER

En París es imprescindible ir a una brasserie y una de éstas que no te puedes peder es Bofinger, cerca de la place de la Bastille abre sus puertas un local histórico en lo que se refiere a la vida parisina, políticos, presidentes de Francia, artístas, han sido parte de sus clientes.

Una decoración exquisita con cristales, maderas, lámparas, todo al estilo de brasserie alzaciana. Una historia que arranca desde principios del siglo XX y que continua siendo una brasserie que tiene abiertas sus puertas hasta la una de la madrugada, perfecto para los que van al teatro, o cualquier otro evento. Menú francés con especialidades como froie gras de canard o bouillabaisse, y si no un clásico "ostras y champagne".

Web: www.bofingerparis.com

Calificación: Muy bueno.